Jueves 11 Agosto 2016
Jueves de la decimonovena semana del tiempo ordinario
La palabra del Señor me llegó en estos términos:
Hijo de hombre, tú habitas en medio de un pueblo rebelde: ellos tienen ojos para ver, pero no ven, tienen oídos para oír, pero no oyen, porque son un pueblo rebelde.
En cuanto a ti, hijo de hombre, prepara tu equipaje como si tuvieras que ir al exilio, y parte en pleno día, a la vista de ellos. Emigrarás del lugar donde te encuentras hacia otro lugar, a la vista de ellos: tal vez así comprendan que son un pueblo rebelde.
Sacarás tu equipaje en pleno día, a la vista de ellos, y saldrás por la tarde, también a la vista de ellos, como salen los deportados.
Abrirás un boquete en el muro y saldrás por él, a la vista de ellos.
Cargarás el equipaje sobre tus espaldas y saldrás cuando sea de noche, cubriéndote el rostro para no ver el país, porque yo te he convertido en un presagio para el pueblo de Israel.
Yo hice exactamente lo que se me había ordenado: saqué mi equipaje en pleno día como quien parte para el exilio, y por la tarde abrí un boquete en el muro con la mano. Salí cuando estaba oscuro y cargué el equipaje sobre mis espaldas, a la vista de ellos.
A la mañana, la palabra del Señor me llegó en estos términos:
Hijo de hombre, ¿no te ha preguntado la casa de Israel, ese pueblo rebelde, qué es lo que estás haciendo?
Diles: Así habla el Señor: Este oráculo se refiere al príncipe que está en Jerusalén y a todo el pueblo de Israel que vive en medio de ella.
Diles también: Yo soy un presagio para ustedes. Lo mismo que yo hice se hará con ellos: serán deportados e irán al exilio.
El príncipe que está en medio de ellos cargará el equipaje sobre sus espaldas durante la noche, y saldrá por el boquete que abrirán en el muro para hacerlo salir; y él se cubrirá el rostro, para no ver el país.
Salmo 78(77),56-57.58-59.61-62.
Pero ellos tentaron e irritaron a Dios,
no observaron los preceptos del Altísimo;
desertaron y fueron traidores como sus padres,
se desviaron como un arco fallido.
Lo afligieron con sus lugares de culto,
le provocaron celos con sus ídolos:
Dios lo advirtió y se llenó de indignación,
y rechazó duramente a Israel.
entregó su Fortaleza al cautiverio,
su Arca gloriosa en manos del enemigo.
Entregó su pueblo a la espada,
se enfureció contra su herencia;
Evangelio según San Mateo 18,21-35.19,1.
Se adelantó Pedro y le dijo: «Señor, ¿cuántas veces tendré que perdonar a mi hermano las ofensas que me haga? ¿Hasta siete veces?».
Jesús le respondió: «No te digo hasta siete veces, sino hasta setenta veces siete.
Por eso, el Reino de los Cielos se parece a un rey que quiso arreglar las cuentas con sus servidores.
Comenzada la tarea, le presentaron a uno que debía diez mil talentos.
Como no podía pagar, el rey mandó que fuera vendido junto con su mujer, sus hijos y todo lo que tenía, para saldar la deuda.
El servidor se arrojó a sus pies, diciéndole: «Señor, dame un plazo y te pagaré todo».
El rey se compadeció, lo dejó ir y, además, le perdonó la deuda.
Al salir, este servidor encontró a uno de sus compañeros que le debía cien denarios y, tomándolo del cuello hasta ahogarlo, le dijo: ‘Págame lo que me debes’.
El otro se arrojó a sus pies y le suplicó: ‘Dame un plazo y te pagaré la deuda’.
Pero él no quiso, sino que lo hizo poner en la cárcel hasta que pagara lo que debía.
Los demás servidores, al ver lo que había sucedido, se apenaron mucho y fueron a contarlo a su señor.
Este lo mandó llamar y le dijo: ‘¡Miserable! Me suplicaste, y te perdoné la deuda.
¿No debías también tú tener compasión de tu compañero, como yo me compadecí de tí?’.
E indignado, el rey lo entregó en manos de los verdugos hasta que pagara todo lo que debía.
Lo mismo hará también mi Padre celestial con ustedes, si no perdonan de corazón a sus hermanos».
Cuando Jesús terminó de decir estas palabras, dejó la Galilea y fue al territorio de Judea, más allá del Jordán.
El Evangelio del día de hoy explicado:
«Señor, ¿cuántas veces tengo que perdonar las ofensas que me haga mi hermano?»
Hoy, preguntar «¿cuántas veces tengo que perdonar las ofensas que me haga mi hermano?» (Mt 18,21), puede significar: —Éstos a quienes tanto amo, los veo también con manías y caprichos que me molestan, me importunan cada dos por tres, no me hablan… Y esto un día y otro día. Señor, ¿hasta cuándo los he de aguantar?
Jesús contesta con la lección de la paciencia. En realidad, los dos colegas coinciden cuando dicen: «Ten paciencia conmigo» (Mt 18,26.29). Mientras la intemperancia del malvado, que ahogaba al otro por poca cosa, le ocasiona la ruina moral y económica, la paciencia del rey, a la vez que salva al deudor, a la familia y sus bienes, engrandece la personalidad del monarca y le genera la confianza de la corte. La reacción del rey, en labios de Jesús, nos recuerda aquello del libro de los Salmos: «Mas el perdón se halla junto a ti, para que seas temido» (Sal 130,4).
Está claro que nos hemos de oponer a la injusticia, y, si es necesario, enérgicamente (soportar el mal sería un indicio de apatía o de cobardía). Pero la indignación es sana cuando en ella no hay egoísmo, ni ira, ni necedad, sino deseo recto de defender la verdad. La auténtica paciencia es la que nos lleva a soportar misericordiosamente la contradicción, la debilidad, las molestias, las faltas de oportunidad de las personas, de los acontecimientos o de las cosas. Ser paciente equivale a dominarse a uno mismo. Los seres susceptibles o violentos no pueden ser pacientes porque ni reflexionan ni son amos de sí mismos.
La paciencia es una virtud cristiana porque forma parte del mensaje del Reino de los cielos, y se forja en la experiencia de que todo el mundo tenemos defectos. Si Pablo nos exhorta a soportarnos los unos a los otros (cf. Col 3,12-13), Pedro nos recuerda que la paciencia del Señor nos da la oportunidad de salvarnos (cf. 2Pe 3,15).
Ciertamente, ¡cuántas veces la paciencia del buen Dios nos ha perdonado en el confesionario! ¿Siete veces? ¿Setenta veces siete? ¡Quizá más!
Rev. D. Joan BLADÉ i Piñol
(Barcelona, España)
†Santo(s) del día,
†San Alejandro «Carbonero»,
†San Tiburcio de Roma,
†Santa Susana de Roma,
†San Rufino de Asís,
†San Casiano de Benevento,
†Santa Atracta de Hibernia,
†Santa Susana Roma,
†San Equicio de Valeria,
†San Alejandro Comana,
†Santa Rustícola de Arlés,
†Santa Filomena Roma,
†Beato Juan Sandys,
†Beato Luis Biraghi,
†San Taurino de Évreux,
†Beato John Henry Newman,
†San Gaugerico de Cambrai,
†Beato Rafael Alonso Gutiérrez,
†San Equicio Valeria,
†Beato Miguel Domingo Cendra,
†Santa Digna Todi,
†Beato Mauricio Tornay,
†San Gerardo Sora,
†saint,
†Beato Appleine,
†Beata Teresa de Calcuta “Perdona nuestras ofensas así como nosotros perdonamos a los que nos han ofendido”
Santa Clara de Asís
(Asís, Italia, 1193 o 1194 – id., 1253) Fundadora de las religiosas franciscanas, llamadas Clarisas. Su padre pertenecía a una de las familias de mejor linaje de la ciudad, y su madre era una dama de profundo sentido cristiano. Cuando tenía 18 años, subyugada por el ardor evangélico de su compatriota San Francisco de Asís (que acababa de poner en marcha la nueva fraternidad), Clara se confió a su dirección: abandonó su casa, y en la capilla de la Porciúncula, donde vivía San Francisco, tomó el hábito de manos del santo, prometiéndole obediencia.
Inmediatamente fue confiada por Francisco al monasterio benedictino de San Pablo de las Abadesas. Allí tuvo Clara que vencer la enconada oposición de sus parientes. Quince días después, Francisco le procuró un asilo más seguro en el convento de Sant´Angelo in Panzo, en las estribaciones del monte Subasio, donde fue a unírsele, fugada también clandestinamente, su hermana Inés.
Posteriormente, San Francisco dispuso para Clara y sus imitadoras una vivienda, adaptada al ideal de pobreza y sencillez que ella misma anhelaba, junto a la pequeña iglesia de San Damián, restaurada por el santo. Y en ella se instaló el pequeño grupo de Damas Pobres, llamadas luego Clarisas, formado inicialmente por Clara de Asís y otras tres compañeras. La comunidad femenina imitaba en lo posible la de los hermanos franciscanos.
Durante cuarenta años, Clara fue la superiora del convento de monjas de San Damián. Su vida era de gran austeridad y muy rica en obras de caridad y piedad. Se cuenta que alejó con sus oraciones a los sarracenos que asediaban la población de Asís. Santa Clara de Asís escribió una Forma de vida en la que insistía en la pobreza y que fue la base para la regla que ella misma redactó con posterioridad (1247-1252), adaptación para las religiosas de la regla franciscana. En 1253, una bula pontificia aprobaba solemnemente la regla que había compuesto. Murió en 1253 y fue canonizada en 1255. Sus restos descansan en la cripta de la iglesia dedicada a la santa en Asís. Su fiesta se celebra el 11 de agosto.

D.José Luis Cotallo Sanchez.
y María, joven inteligente,bachiller, empleado de
Correos, militante de la J.M.,A.C., Vicepresidente
del Consejo Diocesano y, años después,Consiliario
del mismo.
A los 18 años ingresó en el Seminario de Coria.
Pasó luego a la Universidad Pontificia de Salamanca.
Ordenado sacerdote el 21-VII-46, cantó misa el 25 en
la Parroquia de Santiago el Mayor de Cáceres.
En cargos de responsabilidad derramó el fuego
apostólico que ardia en su espiritu,con dinamismo
y simpatía.
De verbo elocuente y evangélico, con unción y
sencillez. Conceptos claros y fluidez persuasiva
Gran personalidad en todos los campos ministeriales.
Original y ameno, con apasionado amor a Cristo.
Pulcro, oportuno y espiritual. Su vasta cultura
hizo fecunda su pluma ágil. Dejó una docena de
obras y muchos articulos publicados.
Su labor misionera llegó a casi toda España.
En Cáceres,Salamanca y Brasil consumió la mayor
parte de su tiempo apostólico.
Ferviente pregonero de la devoción a la Virgen.
Promotor del culto e imitación del extremeño San
Pedro de Alcantara y de San Juan de Avila.
Alma y fuerza de movimientos católicos seglares.
Vida comprometida de entrega y servicio a Cristo y
los hermanos.
JOSE LUIS tuvo conciencia de que su fin estaba
proximo. Y, herido de muerte, siguió en la brecha
predicando, escibiendo, orando e inmolando al Padre,
su ya precaria salud, por la salvación de las almas.
El Señor lo llamó el domingo, 20-IX-70 a los 48 años..
Perdimos un celoso capitán del sacerdocio de Cristo.
Rumor de llanto y plegaria en toda su ciudad natal.
Dolor y orfandad en muchas almas. Concierto emotivo de
elogios y testimonios admirables. catálogo de vivencias,
sacrificios y herotismo de caridades.
JOSE LUIS COTALLO, sacerdote, misionero y apóstol,
sembró sus despojos en la tierra, pero, su espiritu, desde
el cielo, sigue rogando al Padre e intercendiendo por nosotros.Estudió bachiller en el Instituto Nacional de Enseñanza Media de Cáceres.
Dos cursos de Filosofía.
Uno de Teología en el Seminario de Coria.
Cuatro cursos de Teología en la Universidad Pontificia de Salamanca (1943-47).
Premio Extraordinario en Teología Dogmática Fundamental y en Instituciones de Derecho Canónico.
Ordenado sacerdote el 21 de julio de 1946.
Licenciado en Teología en la Universidad Pontificia de Salamanca en el año 1947.
Consiliario de Acción Católica, más de 7 años.
Consiliario de Hombres, 3 años de la HOAC.
Profesor de Religión de varios centros 7 años.
Asesor religioso de PROA.
Coadjutor de las parroquias de San Juan, de Santiago.
Rector y profesor del Seminario de Cáceres 5 años.
Delegado Diocesano de la OCSHA, de la Unión Misional del Clero y pro “Clero Indígena” más de 6 años.
Capellán de Emigrantes Españoles y de la Colonia Española en Sao Paulo, en Brasil. Del 30 de julio de 1957 al 1 de julio de 1959
Director de los Servicios Culturales de la Diputación Provincial de Cáceres más de 5 años.
Delegado Episcopal Patronato Provincial de Archivos, Bibliotecas y Museos, más de 4 años.
El día 1 de Noviembre de 1965 fue nombrado Director del Colegio Diocesano.
Fundador del Colegio José Luis Cotallo
Oración para el Padre Cotallo.
ORACION PARA USO PRIVADO
hombres, que llamaste a tu sirvo
JOSE LUIS al honor del saderdocio
para que lo ejerciese en beneficio
de los pobres,afligidos y necesitados.
Por su entrega total a la misión
evangelizadora y su fidelidad integra
a tu doctrina y voluntad santisíma,
rogamos que, por su intercesión,
antiendas nuestras súplicas para
gloria y amor divinos y beneficioso
de las almas. Amén.
(Padrenuestro,Avemaría y Gloria).

Padre Cotallo de joven.

Virgen de la Montaña, patrona de Caceres, Extremadura y Nuestra Señora del Sagrado Corazón de Jesús.

San Pedro de Alcántara
La fe es la primera raíz, la esperanza es el báculo, y la caridad el fin del camino de toda perfección cristiana.

San Juan De Ávila.
Su virtud principal fue la caridad. Tenía un amor entrañable a la humanidad de Cristo: “el Verbo encarnado fue el libro y juntamente maestro”.
— Asesoría general e información social y humanística.
— Oficina de inscripción con registro de nombres,señas,de cada emigrante.
— Oficina de colocación laboral y orientación para que los emigrantes no
cayecen víctima de explotadores.
— Sección asistencial para brindar los primeros auxilios al llegar al pais,
como esperar en los puertos,darles alojamientos,ect.
— Centro cultural con biblióteca, periodicos, conferencias, y esparcimientos.
— Departamento de ayuda religiosa y moral: Misas en idioma patrio, celebración
de bodas, bautizos y otros sacramentos según contrumes en los pueblos de origen.
— Cooperación e intercambio con centros similares existentes.
Frases del Padre Cotallo.
*<< Quien trata en su vida de hurtar toda clase de sacrificios y
conciba la existencia para el goce y el disfrute, anda muy
lejos de ser un cristiano de verdad.>>*
*<< Caridad no es dar lo que sobra, sino darse: que no es entregar
la cartera, sino el corazón>>*
*<< Y cuando ya nada tengas, regala sonrisas que alivian y arropan,
y plegarias que consuelan y mueven a Dios>>*
*<< El amor y la fe en las obras se ve>>*
